Por fin llegaba la primera victoria del alevín en la Liga, muchísimos partidos son los que se han perdido por la mínima, disputando los encuentros, y al fin la balanza cayó de nuestro lado. Se defendió bien en general y excepcionalmente bien en el tercero y el cuarto, no encajando un silo punto en ninguno de los dos. El partido estuvo dominado de principio a fin por los alhameños, nunca con ventajas significativas pero al menos delante en el marcador. El rebote fue el único pero en el encuentro, pero es que los locales eran muy grandes y conocían cuál su fuerte de cara a los partidos. Pero los nuestros lo peleaban absolutamente todo, además cuando cogíamos rebote atacábamos con contraataques o transiciones muy rápidas que hacían mucho daño a un equipo tan grande. Destacar también que el juego ofensivo fue más colectivo, moviendo el balón e intentando buscar las opciones más claras, pasando de compañero a compañero y disponiendo de tiros todos los jugadores. También se vio, una vez más, como jugadores que carecían de confianza de cara al aro intentaban atacar una y otra vez. Este es el aspecto más positivo de este y los últimos encuentros que hemos disputado. Esperemos que en los siguientes partidos está sea la tónica para que sigamos mejorando como equipo e individualmente, además de conseguir nuevas victorias.