Después de muchas salidas a canchas por toda la región, al equipo alevín le tocaba jugar en casa, y lo hacía contra Los Molinos de Cartagena. El partido fue muy descafeinado, poco vistoso y atractivo incluso para los jugadores. Las diferencias entre ambos equipos eran palpables y los nuestros en estas ocasiones no consiguen sacar su mejor faceta, perdiendo intensidad en ambos lados de la cancha, durante todo el encuentro se mantuvo una línea regular, en la cuál las distancias iban creciendo lentamente con un juego lejos de ser el que estos chavales trabajan día a día. Al final, se consiguió una victoria amplia que deja a los de Animunis con 4-0 en la tabla, empatados con San José de la Vega, al que se enfrentarán el próximo domingo en Cartagena para poner punto y final a la temporada oficial e intentar que acaben invictos en lo más alto de la tabla.