El equipo pre-infantil se dirigió en la mañana del sábado a la capital, con un banquillo corto. El partido fue muy cambiante, sobre todo por parte de los alhameños, que dieron dos versiones distintas de juego.
El primer cuarto fue muy ajustado, alternando el resultado, destacando las buenas acciones del equipo alhameño. Por otro lado, el segundo fue un desastre en el apartado defensivo, cargado de segundas oportunidades para el equipo rival, que estos aprovecharon bien. Llegando así al descanso con un 29-18.
En la segunda parte continuaron igual. En el tercer cuarto, aumentaron la distancia, debido a una escasa anotación de los tecnólogos, con tan solo 10 puntos frente a los 19 del rival. Y así, el partido parecía estar decantado con la diferencia de 20 puntos que alcanzaba el conjunto capitalino. Sin embargo, los alhameños no dieron el partido por finalizado y salieron con una actitud impecable en el último cuarto, recortando la distancia y dejando al rival en tan solo 8 puntos, por los 21 de los nuestros. Pese a esto, no se pudo lograr la remontada final, puesto que los errores anteriores dejaron una amplia diferencia.
Este tipo de partidos son los que sirven para aprender de que son capaces de todo, como sacar fuerzas en el último cuarto y cambiar la actitud de juego. Este partido es el último del año pues hasta la vuelta de navidad no toca disfrutar de otro partido. Por otro lado mandamos ánimos y pronta recuperación a nuestro jugador número 8, Paulo López,que estará ausente un tiempo por una lesión que se ha agravado más de lo que esperábamos. Os deseamos felices fiestas y próspero año nuevo.